The poison diaries es una web promocional del libro de Maryrose Wood publicado recientemente por Harper and Collins como primera entrega de una trilogía orientada al mercado adolescente de narraciones góticas o de misterio en la órbita de Harry Potter.
Jessamine vive con su padre, un boticario que posee un jardín exclusivamente compuesto por plantas medicinales y hierbas venenosas que podrían matar inmediatamente a cualquiera. Su padre nunca le permitió entrar en las zonas más peligrosas del jardín. Pero un recién llegado cambia las cosas. Un extraño muchacho, Weed, huérfano acogido por su padre, se incorpora a la familia. El joven tiene un diabólico talento para tratar con las plantas venenosas. Se inicia una relación amorosa entre los adolescentes.
La autora se inspira en el Poison Garden, fundado en 2004 por la duquesa de Northumberland en los terrenos del Castillo de Alnwick, famoso por aparecer en las películas de Harry Potter.
Cierto es que casi todos los libros que se publican para este mercado adolescente cuentan con una web de promoción creada por el editor, pero ésta es por sí misma una obra de arte digital. Combina elementos informativos e interactivos que hacen cautivadora la navegación por sí misma, y aunque el libro forma una parte importante de la web, la exploración del jardín de los venenos y la explicación de la belladona, la mandrágora, la datura,...es tan bellamente presentada que atrapa inmediatamente la atención del lector.
Cuenta la web con una sinopsis de la obra, una presentación de los personajes, un video explicativo de la duquesa de Northumberland y un pequeño libro con la descripción de los venenos. Naturalmente que la editorial utiliza esta web para vender el libro en papel, pero a su vez, sin querer, está mostrando el camino para enriquecer verdaderamente una obra literaria sin afectar a su contenido textual narrativo. La editorial podía haber pensado en dar la oportunidad al lector digital de acceder al texto completo de la obra, integrado ya en la atmósfera que crea la presentación, por un precio sensiblemente menor al del libro físico. Habría así dado un paso importante para demostrar que la literatura multimedia no tiene por qué refugiarse en el nicho minoritario de los vanguardismos experimentalistas cada vez más dextextualizados y por tanto cada vez más alejados de los lectores corrientes.
¡Ah! se me olvidaba decir que esta maravilla no puede disfrutarse en el Ipad.
¡Ah! se me olvidaba decir que esta maravilla no puede disfrutarse en el Ipad.
Entrada publicada por Juan José Díez
Acudo raudo. Eso sí: ya sabes que hasta el veneno, en la dosis adecuada, es un antídoto... aunque no sé yo si se puede aplicar al amor esto último.
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