Via Bibliómano, conocemos el Ulises de Joyce en comic. Robert Berry ha transformado esta obra literaria en un tebeo dotándola de los recursos mágicos de Internet. El autor reconoce que leer a Joyce puede ser duro y complicado al principio, y que esa experiencia singular no puede ser reemplazada por ningún otro formato: película, cómic o traducción a otro idioma. Concibe su trabajo como un complemento a esa experiencia.
Sin embargo, hay algunas novedades en su propuesta que hacen la tarea un poco más fácil e interactiva. Cada página del cómic tiene un enlace a un blog, “Readers’ Guide”, conducido por Mike Barsanti, que comenta minuciosamente los eventos de la novela y trata de desentrañar sus misterios. El Ulises contiene tantas referencias a la cultura clásica, a la europea, a la bíblica, a la literaria, que el lector, si quisiera comprender cabalmente algunos pasajes, debería recurrir a cada paso a una enciclopedia, y aún así, le sería muy difícil entender el alcance de muchas de las claves de Joyce. Pero aquí interviene el blog. Aparte de permitir los comentarios, dudas o aportaciones de los lectores, funciona como una completísima y documentada edición crítica.
Aunque el Ulises no pueda filmarse, sí se lee muy bien en cómic: dibujos magníficos y sobre todo muy pocas frases, a veces ninguna, por viñeta, de forma que el áspero y dulce inglés de Joyce está siempre en primer plano. No hay duda de que es una magnífica oportunidad para empezar a leer al genio irlandés.
No tiene hipertexto, ni multimedia, pero dispone de la interactividad del blog y, sobre todo, en ella lucen todas las potencialidades de Internet, en este caso, de manera especial la capacidad de almacenar un volumen muy importante de información textual y multimedia. Esta obra en papel sería inviable; por el número de palabras por viñeta que contiene, necesitaría varios tomos enormes, sin contar con los comentarios y el resto de recursos. He aquí una bella y eficaz manera de difundir y enriquecer una obra clásica.
No tiene hipertexto, ni multimedia, pero dispone de la interactividad del blog y, sobre todo, en ella lucen todas las potencialidades de Internet, en este caso, de manera especial la capacidad de almacenar un volumen muy importante de información textual y multimedia. Esta obra en papel sería inviable; por el número de palabras por viñeta que contiene, necesitaría varios tomos enormes, sin contar con los comentarios y el resto de recursos. He aquí una bella y eficaz manera de difundir y enriquecer una obra clásica.
Entrada publicada por Juan José Díez
Una excelente forma de acercar una obra que se lee menos de lo que debería.
ResponderEliminar